Venezuela es un país donde todas las clases sociales dependen esencialmente de la renta petrolera producida con los pocos obreros de PDVSA. Es decir, somos un país rentista en donde nuestra principal riqueza proviene del petróleo y no del trabajo. Este rasgo determina las características de la singular y feroz lucha de clases que se libra en nuestro país y que cada día, con mayor celeridad, se aproxima a un desenlace. Por eso el ataque del imperialismo norteamericano, principal enemigo del pueblo venezolano, en estrecha alianza con la oligarquía criolla, se centra en nuestra primera industria, en nuestra fuente de riqueza; requieren el petróleo venezolano para saciar su voracidad consumista y de dominación imperial; sueñan con el retorno de las corporaciones transnacionales, añoran la meritocracia y arremeten de manera rabiosa contra la política energética nacional, popular y revolucionaria del Comandante Chávez
lunes, 28 de julio de 2008
¿ Cuál es la batalla que estamos librando ?
El problema central de la Revolución, el motor de la lucha de clases y los dos proyectos de país que están en pugna irreconciliable en Venezuela se corresponden con la respuesta a las siguientes preguntas: en beneficio de quién, cómo y en qué invertir la renta petrolera.
El proyecto capitalista: Propone invertir la renta petrolera para crear la base material del capitalismo: la propiedad privada de los medios de producción en beneficio de un puñado de oligarcas criollos y empresas transnacionales, manteniendo a la gran mayoría del pueblo en las más deplorables condiciones de pobreza, exclusión, represión, hambre y miseria. La base espiritual que sustenta el proyecto capitalista es la conciencia individualista que estimula la competencia de todos contra todos, el egoísmo, la mercantilización y deshumanización de las relaciones sociales. Para lograr estos objetivos y perpetuarse, tratan por todos los medios posibles de restaurar la cuarta república a fin de volver a privatizar las empresas del Estado, y los servicios públicos de salud, educación, transporte, telecomunicaciones, etc. Su mayor aspiración es entregarle la propia PDVSA a las empresas transnacionales. Este proyecto capitalista es impulsado por el imperio a través de los sectores contrarrevolucionarios apátridas de la oligarquía y capas medias que, con el ya agotado pacto de Punto Fijo, gobernaron al país durante la cuarta república. Son los mismos sectores individualistas, abiertamente racistas y despreciadores de los humildes que irrumpieron con el golpe de Estado el 11 de abril del 2002, el paro sabotaje petrolero y las guarimbas.
El Proyecto Socialista: Propone usar la renta petrolera para crear la base material del socialismo: la propiedad social de los medios de producción y la base espiritual que lo sustenta: la conciencia del deber social, el humanismo, la solidaridad. Plantea “Sembrar el Petróleo” en beneficio de toda la sociedad priorizando a la gran masa de trabajadores, campesinos y comunidades indígenas excluidos y menospreciados por ser pobres en la cuarta república, huérfanos de alimentación, educación, vivienda, salud, servicios públicos, carentes de cualquier tipo de protección social, alejados de los beneficios de la renta petrolera y víctimas de la violencia del Estado burgués. Son los mismos sectores que, convencidos del liderazgo del Comandante Chávez, salieron heroicamente el 13 de abril del 2002 a enfrentar el golpe de Estado, derrotaron luego el paro sabotaje petrolero y las guarimbas. Estos excluidos de la cuarta república constituyen la base social y política fundamental de la revolución, y deben ser su centro de atención a fin de brindarles acompañamiento sociopolítico revolucionario, capacitación, asesoramiento técnico y financiamiento para que puedan participar organizada, democrática y protagónicamente en la construcción del socialismo.
En resumen, la lucha que estamos librando en todos los rincones del país y en nuestros propios centros de trabajo es, por un lado, entre quienes liderados por el imperio y la oligarquía criolla fascista buscan invertir la renta petrolera para volver a restaurar la cuarta república neoliberal adeco-copeyana, corrupta, entreguista, en beneficio de las empresas trasnacionales y las élites oligárquicas y, por otro lado, quienes luchamos, liderados por el Comandante Chávez, por invertir la renta petrolera para construir una Sociedad Socialista a favor de las grandes mayorías.
Situación Actual
El imperialismo norteamericano y la oligarquía criolla, de cara a las elecciones del próximo 23 de noviembre, están dedicados sin descanso a generar en el seno del pueblo: angustia, descontento y desestabilización; siguen brindándole financiamiento a los contrarrevolucionarios que promueven guarimbas médicas, de transporte, estudiantiles, de gremios profesionales, acaparamiento, especulación, desabastecimiento de productos de primera necesidad; el sicariato, provocan incidentes en la frontera, importan paramilitares, movilizan la 4ta Flota cerca de Venezuela y aceleran la “Alianza Estratégica” con los sectores empresariales más reaccionarios. Estas acciones son estimuladas y reciben todo el apoyo de los medios de comunicación apátridas y proimperialistas, nacionales e internacionales, quienes intentan confundir al pueblo venezolano y a los pueblos del mundo con mentiras, calumnias e infamias.
En este complejo escenario cada día crece el papel de la nueva oligarquía, los socialcapitalistas, que ha nacido y se ha fortalecido dentro de las filas de la propia Revolución manteniendo un discurso revolucionario al lado de sus prácticas mercantilista. Nadie debe engañarse, están agazapados pero se trata de sectores reformistas que en esencia son representantes del imperio, de la oligarquía apátrida y del proyecto capitalista; son restauradores de la cuarta república, promotores de la fragmentación social, el derroche de la renta petrolera y el debilitamiento del Estado Socialista.
En el momento actual los socialcapitalistas, para lograr su objetivo restaurador, vienen desviando el proceso revolucionario, económica y organizativamente, con híbridos como la cogestión, empresas mixtas, empresas de producción social, el cooperativismo sin principios, los consejos comunales mercantilistas, carentes de espíritu y conciencia socialista; se resisten a construir una nueva institucionalidad revolucionaria y continúan alejando el uso de la renta petrolera de las inversiones productivas que generen soberanía alimentaria, industrial, militar y tecnológica.
Desde el punto de vista político, los socialcapitalistas distorsionan el proceso revolucionario proponiendo una supuesta “unidad nacional”, la concertación con el imperio, el diálogo de “hermandad” con los escuálidos, la conciliación de clases y promueven campañas electorales circunscritas al egoísta ámbito local, desconectadas de las implicaciones nacionales e internacionales y arrastrando la pesada carga de los vicios del más puro estilo individualista, es decir, del estilo burgués.
Los socialcapitalistas han venido haciendo este trabajo de alejamiento, estrangulamiento y liquidación de la base ideológica, política, económica y social de la revolución de manera velada, pero cada vez con mayor fuerza, apuntando siempre a la restauración de la cuarta república. Son los mismos grupos pequeño burgueses que han hegemonizado la dirección del proceso revolucionario, que cada vez adquieren mayores espacios y que el pasado 11 de junio de manera peligrosa y vergonzante levantaron la bandera de la “Alianza Estratégica” de la Revolución con lo más apestante de la oligarquía fascista, alianza con quienes, junto al imperio norteamericano, protagonizaron el golpe de Estado de abril del 2.002 y luego participaron, y todavía participan, en todas las acciones de desestabilización promovidas por Bush y las transnacionales.
Todo esto forma parte, incluyendo el rol de los socialcapitalistas, de la planificación de otro golpe de Estado fascista más sangriento que el golpe de Pinochet para derrocar al Gobierno Revolucionario, salir de Chávez, apoderarse de nuestro petróleo y pisotear nuestra dignidad.
ELEMENTOS QUE COMPONEN LA SITUACIÓN ACTUAL
Venezuela es un país rentista en el que todas las clases sociales dependen esencialmente de la renta petrolera que, con pocos obreros, genera PDVSA y posee unas categorías políticas, sociales y económicas especiales.
Hay apropiación de la plusvalía a la par que transferencia de la renta.
Tenemos un gran sector marginal, en el país predominan las ideologías individualistas: marginales, clase media, oligarquías blandas, nuevos ricos.
A la salida de la última bonanza petrolera las clases más apartadas del pezón petrolero, que tenían grandes expectativas con el segundo mandato de Carlos Andrés, se vieron desilusionadas y produjeron un motín.
Quedó en evidencia que el pacto de punto fijo estaba agotado y entramos en etapa de turbulencia que dura hasta ahora.
Desde el 4 de febrero existe un camino que avanza dando tumbos, y no consigue estabilizar una nueva hegemonía, todo queda ambiguamente esbozado: el poder popular, la propiedad social, la formación del partido. Muestra esta situación la profunda lucha de clases, con su correspondiente ideológico, que se escenifica en el interior de la Revolución y la proximidad de una fase de desenlace.
Luego de la derrota sufrida en el referéndum del pasado 2 de diciembre, consideramos indispensable la reflexión profunda y el debate crítico para definir con claridad las causas de este revés (Revisión), la adopción de los correctivos (Rectificación) y el necesario Reimpulso del proceso.
Una revisión de lo acontecido indica que hacia el interior de la Revolución predomina la ambigüedad propia de la ideología pequeño burguesa que favorece las vías hacia la restauración de la cuarta república. El motor ideológico pequeño burgués que desde un principio ha guiado a la Revolución está fundido, sus argumentos para avanzar hacia el Socialismo están agotados e internamente la ideología pequeño burguesa, reformista, conciliadora y restauradora, se erige como el principal enemigo a derrotar dentro de las filas de la Revolución.
FUERZAS QUE INTERVENDRÁN EN LA FASE DE DESENLACE.
La oligarquía consolidada
La neoligarquía
Los marginales, más o menos organizados.
La pequeña burguesía
La clase obrera y sus aliados.
LA QUINTA COLUMNA EN LOS CENTROS DE TRABAJO
Ahora bien, como expresión de la lucha de clases, reflejo de la pugna entre los dos proyectos de país y la batalla que estamos librando en nuestro propio ámbito laboral, vemos como los reformistas y contrarrevolucionarios infiltrados en distintos cargos dentro de las instituciones públicas, insisten en mantener las prácticas de autoritarismo, individualismo, exclusión, discriminación y segregación de los trabajadores y trabajadoras contratados como si fuesen parias; asfixian financieramente los proyectos sociales-productivos y a quienes se dedican a realizar trabajo social; continúan promoviendo el derroche y el burocratismo típicos de la cuarta república y en todo momento se muestran en la práctica contrarios al avance de la revolución y a los lineamientos del Comandante Chávez.
Funcionarios de este tipo siempre están frenando las iniciativas revolucionarias, bloquean todo lo que sea beneficioso para las comunidades y el pueblo en general y además, desde sus posiciones, arremeten directamente contra los trabajadores y trabajadoras revolucionarios. Consideran que la democracia participativa y protagónica, establecida en la Constitución Bolivariana, es sólo para ejercerla en las comunidades, los barrios, urbanizaciones y en las calles. Desde sus puestos de trabajo la Revolución se convierte en sal y agua, siempre le sobran argumentos para oponerse a las propuestas de cambios revolucionarios del Comandante Chávez y el Gobierno Revolucionario. Son los representantes del imperio y la oligarquía dentro de las instituciones y agazapados, como Quinta Columna, se rodean de sus semejantes y mantienen en sus cargos una pequeña plaza altamira, a la espera de cualquier zarpazo.
Los bolivarianos, chavistas, socialista y revolucionarios estamos obligados a unirnos, organizarnos y tomar acciones para sacudir ese nefasto mapa de intereses contrarrevolucionarios y ponerle un freno a esta bochornosa situación que impide, dentro de las instituciones públicas, el avance de la revolución.
UN PASO AL FRENTE
Desde esta perspectiva, los trabajadores y trabajadoras revolucionarios del Ministerio del Poder Popular para Energía y Petróleo, sus entes adscritos, integrantes del PSUV y militantes de otras organizaciones revolucionarias que apoyamos al Comandante Chávez y la política del Gobierno Bolivariano, estamos obligados a dar un paso al frente. Se trata de una tarea histórica indelegable e inaplazable de los trabajadores y trabajadoras revolucionarios y estamos llamados a unirnos y dar nuestro aporte a la creación y consolidación de un movimiento laboral de vanguardia, antiimperialista, anticapitalista, clasista, al margen de los vicios del viejo sindicalismo, que se convierta en una herramienta para luchar contra el burocratismo, la corrupción, que nos permita defender la revolución y profundizarla rumbo a la construcción de una sociedad socialista, en estrecha alianza con los consejos comunales, las misiones, el movimiento estudiantil revolucionario y demás organizaciones del poder popular.
En este escenario de la lucha de clases, un equipo de trabajadores y trabajadoras revolucionarios del Ministerio del Poder Popular de Energía y Petróleo, y sus entes adscritos estamos promoviendo la creación del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía.
Objetivos
El Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía tiene como objetivo principal crear y consolidar un espacio unitario de democracia participativa, protagónica y corresponsable, de formación sociopolítica revolucionaria del sector laboral del MENPET y sus entes adscritos a fin de unificar, coordinar y articular acciones de los trabajadores, trabajadoras y organizaciones revolucionarias, dirigidas a profundizar y defender, dentro y fuera de la institución, la política del gobierno bolivariano en la construcción de una sociedad socialista y acelerar dentro del MENPET la edificación de la nueva institucionalidad revolucionaria.
Se trata de construir, en cada uno de nuestros centros de trabajo, un espacio de formación y participación político-ideológica revolucionaria, totalmente alejado del economicismo, el reivindicativismo y las viejas prácticas sindicaleras, que debe corresponsablemente impulsar los establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, las “Líneas Estratégicas del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013”, las directrices trazadas por el Presidente Chávez para contribuir a desarrollar la política energética nacional, popular y revolucionaria del gobierno bolivariano.
Este espacio corresponsable de participación protagónica y formación tiene necesariamente que estar vinculado internamente con las demás expresiones del movimiento organizado de trabajadores y trabajadoras y, externamente con las organizaciones del Poder Popular (consejos comunales, mesas de energía, el movimiento estudiantil revolucionario, los movimientos culturales, las organizaciones campesinas, etc.), las misiones, el Frente José Félix Ribas, el Frente Francisco de Miranda, el PSUV y demás expresiones genuinas del pueblo revolucionario organizado a nivel nacional e internacional, principalmente de la América Latina y el Caribe.
OBJETIVOS SECUNDARIOS
Posicionar el Frente Socialista de Trabajadores de la Energía en el seno del Poder Popular como expresión de la política energética del Gobierno Revolucionario para la construcción de una sociedad Socialista
Contribuir a fortalecer al MENPET como ente rector de la política energética del Gobierno Revolucionario y convertirlo cada vez más, conjuntamente con sus entes adscritos, en instrumento de combate contra el imperialismo, el capitalismo, por la propiedad social de los medios de producción, el fortalecimiento de las organizaciones comunitarias revolucionarias y su movilización para construir una sociedad socialista.
Elevar la conciencia antiimperialista, el nivel de conciencia del deber social e incrementar la capacidad de organización y movilización de los trabajadores y trabajadoras del MENPET, entes adscritos y comunidades para la defensa y consolidación de la Revolución.
Organizar la participación del voluntariado de trabajadores y trabajadoras del MENPET y sus entes adscritos para la ampliación, mejoramiento, mantenimiento y defensa de la infraestructura y servicios públicos energéticos.
Contribuir a mejorar la eficiencia y eficacia de los trabajadores y trabajadoras del MENPET y sus entes adscritos en el desempeño de sus funciones.
Crear conciencia entre el personal del MENPET y sus entes adscritos, las comunidades, estudiantes, campesinos y el Poder Popular en general, sobre el uso racional y eficiente de la energía.
Contribuir, entre los trabajadores y trabajadoras del MENPET y sus entes adscritos a la conformación de una nueva conciencia social y ética ciudadana sustentada en la solidaridad, honestidad, transparencia, corresponsabilidad y demás principios y valores establecidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
Brindar el apoyo institucional y comunitario a todos los planes, estrategias y proyectos formulados por el gobierno revolucionario orientados a conquistar la plena soberanía nacional, principalmente los del sector energético.
Promover el debate amplio con los trabajadores, trabajadoras y comunidades de las Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013 (Plan Simón Bolívar), principalmente sobre los aspectos relacionados directamente con el sector energético.
Crear mecanismos abiertos y flexibles para transferirle a las comunidades organizadas y debidamente capacitadas la gestión de los servicios públicos de distribución de energía (electricidad, gas, combustible), bajo la rectoría del MENPET.
Brindarle a las comunidades organizadas a través del voluntariado del MENPET, acompañamiento sociopolítico revolucionario, capacitación, adiestramiento y asistencia técnica a los consejos comunales, mesas de energía, consejos campesinos, organizaciones estudiantiles, misiones revolucionarias, cooperativas y demás expresiones revolucionarias del Poder Popular organizado a los efectos de que incrementen su capacidad de gestionar los servicios públicos energéticos.
Promover en el MENPET y sus entes adscritos un modelo de gestión de los servicios energéticos centrado en la atención a las comunidades.
Impulsar en el MENPET y entes adscritos el ejercicio de la contraloría revolucionaria para profundizar dentro de la institución la lucha contra la corrupción, el burocratismo, así como las desviaciones reformistas y anarquistas.
Promover en el MENPET y entes adscritos mecanismos que aceleren la modificación, eliminación y/o sustitución de aquellas normas y procedimientos internos que traban e impiden la transferencia de recursos directamente a las comunidades organizadas en consejos comunales para que las mismas, con el debido acompañamiento sociopolítico revolucionario y asistencia técnica formulen, ejecuten, administren y controlen socialmente los proyectos comunitarios energéticos.
Luchar por la integración, coordinación y articulación de una política de Gestión Energética Comunitaria Revolucionaria coherente con los lineamientos establecidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, al Plan Simón Bolívar, el Ministerio del Poder Popular para la Participación y Protección Social y las directrices trazadas por el Comandante Chávez y el Ministro Rafael Ramírez, para el impulso del la explosión revolucionaria del poder comunal.
Por una adecuada dotación de personal y herramientas de trabajo a quienes dentro del MENPET y sus entes adscritos impulsan programas sociales, productivos y proyectos comunitarios revolucionarios.
Promover una política de recursos humanos que frene el ingreso de contrarrevolucionarios y le de prioridad para el ingreso al MENPET y sus entes adscritos a personal que labora, haya laborado o pertenezca a las mesas técnicas y misiones del gobierno revolucionario.
Impulsar en el MENPET, entes adscritos y comunidades relacionadas: los medios alternativos, la cultura y la tecnología popular.
Impulsar la unión y cooperación energética de los pueblos de los países pertenecientes al ALBA, América del Sur, Centro América y el Caribe.
Luchar contra el saqueo de los recursos naturales, la ocupación militar, el secuestro a los luchadores revolucionarios y la guerra genocida impuesta por las transnacionales y los ejércitos imperiales contra los países pobres. Por la autodeterminación y solidaridad militante a todos los pueblos que combaten por su liberación del yugo imperialista.
Conformación de los Equipos Promotores y Acciones Inmediatas
La incorporación al Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía es una acción voluntaria. En cada entidad federal este voluntariado tiene como tarea inmediata conformar el equipo promotor provisional y luego el equipo promotor definitivo. Entre las funciones del equipo promotor provisional debemos señalar las siguientes:
Realizar, en cada centro de trabajo, el censo de trabajadores y trabajadoras revolucionarios aspirantes a integrar el Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía.
Promover la participación de los integrantes del Frente Socialista y el voluntariado, dependiendo de sus capacidades técnicas y profesionales, para apoyar a las comunidades organizadas en Consejos Comunales y Mesas de Energía en los planes nacionales de electrificación y gasificación para la ampliación y mejoramiento de los servicios energéticos.
Promover la concientización del personal del MENPET, entes adscritos y comunidades en el uso racional y eficiente de la energía y la participación en las Jornadas de Sustitución de Bombillos de la Misión Revolución Energética.
Crear en los centros de trabajo espacios de participación, debate y estudio a través de foros, charlas, conferencias, círculos de estudio, eventos político-culturales, etc.
Crear mecanismos que permitan crear una red de comunicación, información y movilización rápida y contundente de los revolucionarios, los consejos comunales y el pueblo organizado en defensa de la Revolución Bolivariana en general y, particularmente, de la infraestructura y servicios energéticos.
Organizar las reuniones estadales de trabajadores y trabajadoras de la energía para realizar diagnósticos de cada centro de trabajo, debatir y formular propuestas para la Declaración de Principios, los Estatutos y el Plan de Acción del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía.
Elegir democráticamente en los centros de trabajo y en las Asambleas Estadales a los voceros y voceras que participarán en el 1er Encuentro Nacional del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía a realizarse los días jueves 28, viernes 29 y sábado 30 de agosto de 2008, y recopilar los acuerdos y conclusiones de la misma. Entre estos voceros y voceras deberán incorporarse trabajadores y trabajadoras que hayan sido electos democráticamente en cada centro de trabajo, de acuerdo a la cuota estadal establecida por la Coordinación Nacional Provisional del FSTTE.
Debemos indicar que todo trabajador revolucionario o trabajadora revolucionaria del Ministerio del Poder Popular para la Energía y Petróleo, MENPET y entes adscritos puede ser promotor o promotora provisional e integrante del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía.
Se trata de crear un espacio socialista de participación protagónica y formación político-ideológica para los trabajadores y trabajadoras del MENPET y entes adscritos, decididos a defender y profundizar la revolución. En este sentido en el Frente Socialista debemos pasar de las definiciones teóricas a las acciones concretas. Estamos obligados a unir la teoría revolucionaria con la práctica revolucionaria, a unir a los trabajadores y trabajadoras revolucionarios del MENPET con todas las fuerzas organizadas del Poder Popular y crear mejores condiciones para dar organizadamente nuestro aporte a la construcción del socialismo. En base a estas consideraciones proponemos la siguiente metodología:
Metodología
Todo aquel que desee incorporarse como promotor o promotora provisional del FSTTE debe elaborar el listado preliminar de los trabajadores y trabajadoras (fijos o contratados, cualquiera sea la función que desempeñe), que haya demostrado hasta los momentos, dentro de las empresas de electricidad y gas, así como en el MENPET, ENAGAS, FUNDELEC, PDVSA y demás entes adscritos, ser chavistas, bolivarianos, militantes de PSUV o militante revolucionario.
Debemos abrirnos a la mayor participación, alejarnos del sectarismo, pero igualmente debemos evitar incorporar en ese listado a personas inconsecuentes y vacilantes. La participación directa, activa y consecuente en apoyo a la Revolución Bolivariana y al Comandante Chávez, su disposición a dar trabajo voluntario a la institución y a las comunidades, la honestidad, humildad, solidaridad, cooperación, humanismo y sensibilidad social dan cuenta del tipo de integrantes que necesitamos en el Frente Socialista.
La lista que elabore cada promotor o promotora provisional debe hacerse en base al modelo anexo y, una vez recopilada la información, ha de ser entregada al respectivo coordinador o coordinadora estadal o de núcleo de Mesas de Energía para evitar la duplicidad de datos, así como para planificar la logística, operativos y sitios de reuniones.
El coordinador o coordinadora estadal o de núcleo de Mesas de Energía debe depurar el listado y asignarle a cada promotor o promotora provisional del Frente Socialista la responsabilidad de distribuir personalmente a los trabajadores y trabajadoras de su lista ya depurada, los documentos y convocatorias a reuniones, operativos y demás actividades de movilización que realice el Frente Socialista.
Realizadas las asignaciones, el coordinador o coordinadora estadal o de núcleo de Mesas de Energía deberá fijar y organizar entre el 28-07-2008 y el 21-08-2008 la fecha de las reuniones estadales y de núcleo del equipo promotor provisional del FSTTE y enviar el cronograma de actividades y reuniones, el resultado de las mismas y la lista de participantes a la Coordinación Nacional Provisional del Frente Socialista. Dicha información debe ser enviada a la dirección electrónica fsttenacional@gmail.com.
Los promotores o promotoras provisionales deben contactar a cada uno de los trabajadores y trabajadoras de la lista de prospectos que le hayan asignado, entregarle a cada uno los documentos del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadores de la Energía e invitarlos a cumplir con el cronograma de actividades.
En la primera reunión o primeras reuniones es necesario someter a consideración, entre otros, los temas propuestos en el documento o papel de trabajo inicial: la coyuntura actual, el diagnóstico de cada centro de trabajo, el papel protagónico que debe desempeñar la clase trabajadora para impulsar la nueva institucionalidad revolucionaria, los objetivos del FSTTE, la problemática energética, el plan de formación político-ideológica y el plan para el desarrollo de actividades concretas de movilización en el ámbito laboral, comunal y en las calles para defender el proceso revolucionario y profundizar la revolución combatiendo el capitalismo, el imperialismo, la corrupción, el burocratismo y el apoyo a los candidatos y candidatas del PSUV a las alcaldías y gobernaciones.
Antes de realizar el 1er Encuentro Nacional del FSTTE, se deben debatir, en cada centro de trabajo, núcleo y entidad federal, el diagnóstico de la situación, los objetivos y el Plan de Acción de los Trabajadores y Trabajadoras Revolucionarios de la Energía con base a las especificidades de cada región.
El coordinador o coordinadora estadal y de núcleo de Mesas de Energía, conjuntamente con los promotores y promotoras provisionales son los responsables de organizar la participación de los trabajadores y trabajadoras revolucionarias del MENPET, y sus entes adscritos en el 1er Encuentro Nacional del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía.
El 1er Encuentro Nacional del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía se celebrará los días jueves 28, viernes 29 y sábado 30 de agosto de 2008, para elaborar las propuestas de Declaración de Principios, los Estatutos, el Plan de Acción Nacional y elegir democráticamente la Coordinación Nacional del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía. Esta Coordinación Nacional y el equipo de promotores definitivos, además de darle continuidad a las funciones de los promotores y promotoras provisionales, deberán someter a consideración de todos los integrantes del FSTTE las conclusiones y propuestas del 1er Encuentro y organizar la Asamblea Constitutiva del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía que debe realizarse en el mes de Octubre de 2008, así como recopilar los acuerdos y conclusiones de la misma.
Los voceros y voceras que asistan a la Asamblea Constitutiva del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energíala Declaración de Principios, los Estatutos, el Plan de Acción del Frente Socialista de Trabajadores y Trabajadoras de la Energía y elegir democráticamente en la misma a integrantes definitivos de la Coordinación Nacional del FSTTE según lo establecido en los Estatutos. deberán debatir y aprobar